Nuevos latidos en la Tierra
- Natalia Idárraga
- 1 ene 2024
- 4 Min. de lectura
Actualizado: 16 mar 2024
(Al final de este blog encontrarán el audio, para que lean acompañados si así lo prefieren)
Esta por supuesto tenía que ser la primera publicación del año.
Una nueva vida llegará a mi familia, unos nuevos pies caminarán y compartirán la Tierra con nosotros, unas nuevas manos me acompañarán a cruzar la calle y el sonido de una risa llenará muchos espacios de alegría.
Gracias por tomarse el tiempo de leer este texto tan íntimo y las sensaciones que me causa hacerlo, sin duda, uno de los más especiales e importantes que escribiré en mi vida.

El primer escrito que hago para ti, sobrina preciosa.
Hace apenas dos meses y medio que supe de tu llegada a este increíble y caótico planeta que compartimos con millones de habitantes a diario. Aunque consciente de la multitud que comparte este espacio, mi mente solo puede concebir tu presencia en él; desde que recibí la noticia, mi imaginación ha creado innumerables escenarios contigo. Es difícil expresar con palabras lo que me haces sentir, incluso sin haberte visto todavía. Quizá sea porque desde el día en que supe de tu existencia, he sentido tu presencia de una manera inexplicable.
No puedo sentirme más afortunada al imaginarte, al crearte en mi mente; este ha sido, sin duda, mi momento de mayor creatividad. A diario, construyo en mi imaginación partes de ti que aún no conozco, pero que son extensiones muy lindas de tu mamá y papá. Antes de dormir, imagino tus ojos, tu cabello, tu nariz, tu boca, tus manos y tus pies. Incluso cuando mi mente está llena de pensamientos acelerados sobre ti, también especulo sobre cómo será tu personalidad. Sin embargo, consciente de la importancia de que esto sea una sorpresa, hago pausas para no revelar demasiado y permitirme asombrarme con las maravillosas escenas que disfrutaremos cuando finalmente te veamos y te demos la libertad de ser tal como tú decidas ser.
Te llevarás una gran sorpresa cuando finalmente puedas contemplar el mundo al que llegas: tienes a la mamá y el papá más extraordinarios. Son seres humanos generosos, comprensivos, llenos de amor y nobleza. Han estado dedicando tiempo y esfuerzo para equiparse con las mejores herramientas que les permitan recibirte y asegurarse de que seas el ser más feliz del mundo. Desde este momento, ya eres afortunada, así que asegúrate de aprovechar esa suerte a tu favor en cada oportunidad que tengas.
Gracias por habernos elegido como tu familia, desde ya me siento muy afortunada de saber que vas a llegar al mundo, tu misión y propósito en él, más allá de lo que otros siempre puedan esperar de ti, es que seas fiel a tu esencia, a tus sueños y a lo que genuinamente te llene el alma.
Vienes con unas alas gigantes, vienes a transformar el mundo de quienes te vamos a disfrutar cerquita y estoy segura que también, la vida de quienes tengan que cruzarse contigo así sea por un ratico. Qué suerte tenemos quienes nos impregnemos con un poco o mucho de tu existencia, si esto nos haces sentir desde ya, no quiero imaginar lo que será en toda una vida contigo, viéndote crecer y ser a tu manera.
Los primeros en leer este texto fueron tu papá y tu mamá, pero algo tienes que saber, te escribiré muchísimos más, solo para ti, los haré pensando en ti, así que luego viviremos ese momento juntas.
Agradezco que, desde este momento, hayas despertado en mí una sensibilidad y emotividad más profunda. No puedes imaginar cuántas lágrimas han caído mientras escribo estas palabras. Anhelo verte ya, pero estoy dispuesta a esperar tu llegada con paciencia y amor. Cuento los días con emoción y sueño con ese momento en el que finalmente nos encontraremos. La espera se llena de amor, así que, cada día que pasa nos acerca un poco más a ese instante donde al fin podremos sentirnos piel a piel.
Y antes de terminar, debo confesarte algo, muchas veces te imaginé con la apariencia física de un niño, pero en las últimas dos semanas de compartir más tiempo con tu mamá, de ver cómo ibas creciendo dentro de ella, empecé a sentir que eras niña, lo que me hacía sentir un poco preocupada, porque había hecho bastantes apuestas, que por supuesto, ahora debo pagar, pero no te preocupes, luego te las cobraré con muchos besos y abrazos, eso sí, solo si tú quieres.
Por cierto, escuché tu corazón hace unos días, qué sensación más increíble. Solo puedo pensar en ese sonido día a día, porque reafirman mi ilusión de que desde hace un tiempo atrás, ya haces parte de este mundo.
Gracias por lo que me has hecho sentir en estos meses, te amo muchísimo y siempre, siempre, siempre voy a estar para ti.
Feliz 2024.
Que este año abunde el amor sano y hagan mucho espacio para lo que les da tranquilidad al corazón.
Gracias por aceptar un poco de mi compañía a través de lo que escribo.
Ojalá esa compañía perdure en este año y por más tiempo.
Comentarios